Pido disculpas por este mes que he estado sin postre nada, ha sido un mes de cambios, de casa y con muchas cosas que no me han permitido estar pendiente ni del blog, ni de. hacer recetas que es lo que mas me gusta y desestresa.
Ahora que ya esta todo en orden, prometo que no volveré a dejarlo a no ser que sea de fuerza mayor, como fue esta vez.
Y para ello quiero comenzar la nueva andadura con este Pie de Mantequilla de Cacahuetes sin hornear, una delicatessen que hará explotar tu paladar de felicidad, y encima es super fácil de hacer, espero la disfrutes tanto como yo.
INGREDIENTES:
Para la Base:
200 Gramos de tus Galletas Veganas preferidas.
65 Gramos de Pretzels, o sino de cualquier galleta salada vegana que te guste.
115 Gramos de Mantequilla sin sal, derretida
Para el Relleno:
250 Gramos de Queso Crema Vegano.
250 Gramos de Mantequilla de Cacahuetes Suave.
30 Gramos de Azúcar Glas.
1 Cucharadita de Extracto de Vainilla.
240 Gramos de Nata Vegana (Heavy Cream).
Para el Topping:
240 Gramos de Nata Vegana (Heavy Cream).
30 Gramos de Cacahuetes Tostados y Salados.
50 Gramos de Chocolate Negro.
ELABORACIÓN:
Coloca las galletas y los pretzels en un procesador de alimentos o licuadora y mezcle hasta que este finamente triturado.
Agregua la mantequilla derretida y mezcla bien.
Vierte las migas en un molde para pastel de 22 centímetros. Presiona firmemente para formar una costra y colocalo en la nevera.
Vierte el queso crema, la mantequilla de maní, el azúcar y la vainilla en un bol grande para mezclarlo todo.
Bate bien con una batidora eléctrica hasta que esté espeso y suave.
Agrega la nata y bate durante 2-3 minutos hasta que la mezcla esté espesa y cremosa.
Vierte la mezcla de mantequilla de maní sobre la corteza y alisa la parte superior.
Llévala a la nevera durante al menos 6 horas, o incluso mejor, durante la noche.
Coloca la nata del topping en un bol grande y bate con una batidora de varillas hasta que la nata monte.
Cubre el pastel con la nata montada, trocea y esparce sobre esta los cacahuetes.
Derrite el chocolate y rocíalo por encima de la tarta como decoración final.
Fotos por Frank Betancort.